skip to main |
skip to sidebar
Es de sobra conocido que tomar bebidas y alimentos dulces o con fuerte acidez afecta nuestros dientes y por tanto, tenemos un alto riesgo de padecer caries. De la misma manera, los océanos, que son cada vez más ácidos a consecuencia del dióxido de carbono, están provocando que los corales sean más frágiles y puedan llegar a morir. Esta analogía fue realizada por Nell Bennet, una alumna de Londre que diseñó un productos que podría mitigar la acidez del agua cerca del coral.
La propuesta de esta joven investigadora es un coral artificial fabricado con materiales ricos en minerales que debe ser colocado en el arrecife para que se vaya disolviendo lentamente e ir bañando de agua alcalina los corales vecinos. Se trata simplemente de un material que se disuelve en el agua.