Las perlas son hermosas, pero debes de saber que son producto del dolor. Toda perla es la consecuencia de una ostra que ha sido herida por un grano de arena que ha entrado en su interior. En la parte interna del molusco se encuentra una sustancia llamada “nácar” y cuando un grano de arena penetra de forma accidental en la parte interior de las valvas de la ostra, ésta lo recubre con miles y miles de capas de nácar para protegerse.
Como resultado, se va formando una hermosa y brillante perla.
En otras palabras, las perlas son quistes de nácar que forman los moluscos para aislar un cuerpo extraño que ha entrado en el interior de su cuerpo.
Aunque por norma su tamaño es muy pequeño, la perla más grande del mundo pesa 34 Kilos, una rareza que fue encontrada en la isla de Palawan con valor incalculable.
En realidad, la perla natural es rara, es una de esas curiosidades del mar que sorprenden y se encuentran casi sólo en los museos. Sin embargo, hoy en día, casi todas las perlas que encontrarás en el mercado están cultivadas.